-Pastas de té.

-Pasillo y escalera.

-El salón comedor. 2009

-Primavera-verano de 2009.

-Primavera de 2008

-Detalles.

-Un día precioso para inaugurar.

Primavera de 2007. El jardín.

-Primavera de 2007. Todo listo para empezar.

Invierno blanco de 2007

-Menudo "jardín"

Así se encontraba nuestro jardín en noviembre de 2006.

Y así en dos meses después.

-2006, un año después...

   Realizada la mudanza y con una niña de dos años a cuestas, empezaba la tarea de barnizar, pintar, tirar tabiques interiores y levantar otros nuevos... limpiar... Aprendimos a hacer cemento y, con la ayuda de un buen amigo, a levantar el cerramiento y la leñera con bloques de hormigón.
   Al llegar el otoño éste era el aspecto de lo que, un año antes, parecía una labor imposible.

-Mucho trabajo, pero mucha ilusión.

Como decía en otra ocasión, el interior de la casa era aún más deprimente, sucio y abandonado que lo que nos encontramos en el exterior. Pero... en nuestra mente se dibujaba ya la imagen de lo que queríamos que fuera nuestra casa. ¡Habría que trabajar muuuuuuucho!

-Los inicios. Una casa por reformar.

Finales de verano de 2005. Éste era el aspecto de la casa cuando nos decidimos a embarcarnos en esta aventura. Sin duda, era necesario pensárselo bien.
Estos son los exteriores. En la próxima entrada os enseñaremos el interior, si cabe , más deprimente.